domingo, 11 de diciembre de 2011

Jane Eyre, en cartelera




Título original: Jane Eyre. Dirección: Cary Joji Fukunaga. País: Reino Unido. Año: 2011. Duración: 120 min. Género: Drama, romance. Guión: Moira Buffini; basado en la novela de Charlotte Brontë. Producción: Alison Owen y Paul Trijbits. Música: Dario Marianelli. Fotografía: Adriano Goldman. Montaje: Melanie Ann Oliver. Diseño de producción: Will Hughes-Jones. Vestuario: Michael O’Connor. Estreno en España: 2 Diciembre 2011.
Intérpretes: Mia Wasikowska (Jane Eyre), Michael Fassbender (Edward Rochester), Jamie Bell (St. John Rivers), Judi Dench (Sra. Fairfax), Holliday Grainger (Diana Rivers), Sally Hawkins (Sra. Reed), Tamzin Merchant (Mary Rivers), Imogen Poots (Blanche Ingram), Sophie Ward (Lady Ingram).

Sinopsis:
Jane Eyre (Mia Wasikowska) huye de Thornfield House, donde trabaja como institutriz contratada por el acomodado Edward Rochester (Michael Fassbender). La aislada e impresionante mansión, así como la frialdad del Sr. Rochester, ponen a prueba la resistencia y fortaleza de la joven, educada en un orfanato. Pero al reflexionar sobre su pasado y recuperar su curiosidad natural, Jane regresará a Thornfield House y al terrible secreto que esconde el Sr. Rochester.


Mia Wasikowska y Michael Fassbender

Calificación: 9, Magnífica.
Lo mejor de la película: Sin lugar a dudas, la mejor versión hasta la fecha de este clásico inglés. La novel dirección de Fukunaga nos deja impresionados. Magistral la interpretación de Wasikowska (la “Alicia en el país de las maravillas” de Tim Burton) y Fassbender (visto recientemente en “Un método peligroso”): dos actores de moda en estado de gracia. La fotografía de Goldman no puede ser mejor, qué forma de iluminar los oscuros interiores de esos góticos lugares: increíble cómo nos muestra la luz de una vela. Para coronarlo todo, la magnífica banda sonora de Dario Marianelli, atención a los solos de violín, para elevarse al cielo.    
Lo peor de la película: Al existir más de una veintena de versiones de esta obra literaria, tanto para el cine como para la televisión, algunos pueden pasar de ver esta nueva versión y no saben lo que se pierden. Nada parecido con versiones anteriores, y muchos menos con versiones para la televisión. Esto es cine con mayúsculas.

Trailer de la película:

3 comentarios:

  1. Paco, yo creo que tú y yo hemos llegado a esta peli desde sitios distintos. Pienso que está bien (no te asustes, que no voy a meter una crítica como la de “La voz dormida” en que salí del cine echando humos por las orejas). Pienso que el film tiene bastante calidad, sobre todo técnica: los planos son una maravilla, y no solo por la fotografía (como se dice siempre cuando la peli es mala) sino por la ambientación, los paisajes, los vestidos, los interiores, etc. Solo por ello merece la pena.

    Sin embargo, yo he tenido un problema bastante gordo, y es que no vi a Jane Eyre por ningún sitio. Te decía antes que habíamos llegado desde sitios diferentes: tú desde las pésimas series televisivas y versiones en cine de las que hablas y yo desde la novela misma. Y no digo esto con ánimo de menospreciar tu versión pues, tal vez, incluso sea al contrario, pudiendo darse el caso de que tengas tú más objetividad que yo.

    Desde mi punto de vista es la propia actriz la que lo derrumba un poco todo. El personaje de Jane Eyre es el de una chica que, en primer lugar, no es guapa, y en segundo lugar, nos tiene que transmitir un magnetismo cargado de misterio, con una fuerte personalidad, aunque introvertida. Debe tener una intensidad que llame la atención y una fuerza interior fuera de lo común, pues hay que considerar su infancia desgraciada, sin afecto, de soledad y desprecio. Toda esta fuerza que la novela consigue, cuando vemos a esta - perdóname Paco -, niña mona (parece que siempre que hablo mal de una peli salgo con lo de la niña mona), flojita, suavecita, casi dulce, con carita de caramelo, bonita… No es Jane Eyre.

    Se me puede decir que el cine es libre para reinterpretar ciertas cosas (aunque por lo que recuerdo de la novela, que la leí creo que con 15 años -lo de raro, Paco, me viene de niño-, la peli trata de seguir el texto de forma más o menos ajustada, tal vez el flash back del inicio se salga un poco), pero es que el personaje de ella es incomprensible. Y tengo la sensación de que sí han tratado de conseguirlo, pero ha sido tan clamorosamente fallido que no sé cómo al director se le ha colado. Considero que gran parte de la responsabilidad es del Fukunaga este, que no ha entendido la novela, no solo de la actriz.

    Para arreglarlo habría que empezar por cambiar a la actriz porque no puedes poner a una niña tan bonita en este papel, aunque esto choque con los criterios comerciales que, doy por seguro, están detrás. Pero aun entendiendo este tipo de presiones, puedes elegir a otra menos mona aunque también con encanto. Uno de los asuntos claves de la historia es que Jane Eyre no es guapa, y eso condiciona la interrelación con los otros, pues los seduce a pesar de su poca belleza física, es decir, por su magnetismo personal. Si tiramos por tierra esta clave dejamos a la peli medio vacía.

    De todos modos, ya puestos con esta, que el Fukunaga le de cañilla: tía, reconcentrate, habla con más firmeza (la vi en VO, si fuese doblada lo entendería), que la azuce “¿Eres tonta o que te pasa?”, que le pegue para que le salga algo de mala leche, y no porque sea malo el personaje. Yo la habría metido tres meses, antes de rodar, en un internado a palo limpio, tipo “Sodoma” de Pasolini. Y lo digo en serio, que un actor se debe a su oficio, y si no, que se lo pregunten a la Verónica Sánchez, que se puso como una foca para rodar “Gordos”. Pues con la Wasikowska igual, un mes comiendo solo ratas (vivas). El cante es del director, sin ninguna duda.

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  2. El que sí está clavado es el Fassbender, que borda el personaje. Y hablando de clavados, ¿Os habéis dado cuenta de que es idéntico al Day Lewis? (En esta peli al menos)

    Apartado de recomendaciones asociadas: “Tess” de Román Polanski. ¡Jesús, tu tema! Podéis comparar a la Nastassja Kinski con esta. Basada en otra novela británica de la misma época (creo era uno de estos autores victorianos, no sé si Thomas Hardy u otro parecido)
    Paco, léete la novela y volvemos a hablar. Yo me veré las teleseries esas.
    Nota: estaré un tiempecillo largo desconectado. Me marcho a Madrid, intentaré más adelante escribir algo desde allí, pero pasará un tiempo, me espera un tsunami.

    Un abrazo. Galo

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  3. [NOTA AL MARGEN]
    Paco, perdóname este añadido y ya os dejo. Quiero explicar algunas cosas para que se entienda lo que digo. Jane Eyre es el símbolo de la rebeldía ante la injusticia de la autoridad. Representa a la “fierecilla indomable” que se niega a someterse a cualquier tipo de dictamen que considere injusto, lo que le cuesta la marginación. Es, utilizando términos actuales, una joven “subversiva” desde niña.

    Si te das cuenta, el personaje que interpreta la niña al comienzo de la peli sí está logrado, capta la esencia de Jane Eyre, es decir, una niña contestona, indomesticable, que le pega al hermano porque la maltrata y que le dice sin titubeos a la tía (madrastra) lo que piensa de ella: ese es el tono del personaje, y también de adulta. Cuando está en esa especie de reformatorio se rebela contra las injusticias del mismo, costándole castigos de todo tipo y el aislamiento.

    Por este motivo, cuando va a trabajar de institutriz a esta mansión, se repite el esquema pero a otro nivel, en este caso en el mundo de los adultos y sus desigualdades sociales. En aquellos tiempos las institutrices procedían de clases humildes e iban a trabajar a las mansiones de las clases altas en calidad casi de esclavas. De ahí que cuando se encuentra con Fassbender (no recuerdo el nombre del personaje) y este se cae del caballo, al decirle ella que es la institutriz, la obliga de mala manera a traérselo, por lo que se repite su historia: el trato vejatorio por parte del poder. Aquí se produce el primer choque de trenes.

    Dicho choque de trenes culmina en la primera conversación que tienen ambos en la casa, en la que él, de malas maneras y peores humores, la culpa de ser la responsable de la torcedura de su tobillo. La trata con desprecio pues es su institutriz y considera que puede hacerlo (relación amo – esclava), pero Jane Eyre le responde de manera altiva, orgullosa y enérgica (rebelión nuevamente ante la arbitrariedad del poder), por lo que inician ambos un auténtico duelo de espadachines en el que se empiezan a tirar los dardos. Los comentarios despectivos sobre la fealdad que se hacen el uno al otro son flechas envenenadas dichas con mala leche por ambas partes. El tono de ella es el mismo que cuando de niña ponía de vuelta y media a la madrastra.

    En aquella época, que una institutriz le replicase de este modo al amo era toda una osadía (subversiva) y que le habría costado el despido inmediato. Sin embargo Fassbinder no la echa, entre otras cosas, porque le impresiona este atrevimiento y le empieza a provocar “el feeling” de la atracción, aunque se pase un día cabreado pegando tiros fuera de la casa.

    Fukunaga entiende que el tono de ella debe de ser sumiso y suave, pues es la institutriz, cuando en realidad tiene que ser altanero y provocativo. La secuencia en la peli presenta a un un Fassbender (que sí entendió la novela) prepotente e insolente y una Wasikowska (J. Eyre) sumisa, que responde con tono suave, cuando, en realidad, es una pelea de gatos. El tono de voz que Fukunaga (el responsable) le da a Wasikowska destruye la tesis de la historia, siendo algo parecido a quitarle el nervio a una muela y dejar que se descalcifique. En fin, no sé si con esta aclaración se entiende el meollo del problema. Os dejo.

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