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viernes, 29 de junio de 2012

Recordando... Los santos inocentes, de Mario Camus




Año: 1984
País: España
Dirección: Mario Camus
Producción: César Benítez Andrés Santana
Guión: Antonio Larrete, Manuel Matji y Mario Camus, basado en la novela homónima de Miguel Delibes
Fotografía: Hans Burmann
Música: Antón García Abril
Montaje: José María Biurrún
Vestuario: León Revuelta
Dirección artística: Rafael PAlmero

Intérpretes: Alfredo Landa, Francisco Rabal, Juan Diego, Terele Pávez, Belén Ballesteros, Juan Sachez, Ágata Lys, Agustín González, Manuel Zarzo, Mari Carrillo, José Guardiola.

Sinopsis: En la España franquista, durante la década de los sesenta, en un cortijo de Extremadura, una familia de campesinos vive miserablemente bajo la férula del terrateniente. Su vida es renuncia, sacrificio y obediencia. Su destino está marcado y sólo algo violento e imprevisto podrá romper sus cadenas.



"Afortunadísima adaptación de la novela de Delibes, uno de los mayores éxitos del cine español dentro y fuera de nuestras fronteras. Rabal y Landa bordan sus papeles"
(Fernando Morales. El País)


Fotograma de "Los santos inocentes"


Los Santos Inocentes es considerada una obra maestra del cine español. Ganadora de varios premios en el Festival de Cannes de 1984, recibió el de Mención Especial del Jurado para el director santanderino, Mario Camus, y el premio compartido de Mejor Actor para Alfredo Landa y Paco Rabal. Sin duda, una obra básica para comprender nuestra intrahistoria.
En esta ocasión vamos a detenernos en valorar dos aspectos de esta joya del cine español:

1. La adaptación literaria. No era ésta la primera vez que Mario Camus adaptaba una obra de la Literatura Española, anteriormente lo había hecho con La leyenda del alcalde de Zalamea (1972), Los pájaros de Baden-Baden (1975) o La colmena (1982). Igualmente, tras el éxito de esta película, Mario Camus seguiría apostando por adaptar al cine obras literarias españolas, como La casa de Bernarda Alba (1987), La celestina (1996) o La ciudad de los prodigios (1999).

La película que nos ocupa está basada en la novela homónima de Miguel Delibes, publicada en 1981. La novela cuenta la historia de una familia extremeña que trabaja en condiciones de servidumbre para una familia rica. Esta familia acaba de ser realojada en una nueva finca, por lo que les adjudican las nuevas tareas a realizar, que llevan a cabo sin la más mínima reticencia, soportando los abusos y las humillaciones por parte de los burgueses que les dan de comer, además, tienen que mantener a una hija pequeña que padece una brutal enfermedad y al hermano de la madre, retrasado mental. La vida diaria de miseria, sufrimiento y humillación de esta familia se entremezcla en la película con fragmentos de un tiempo futuro en el que los hijos intentan encontrar una nueva forma de vida, en la ciudad.

Los principales temas que toca esta novela de Delibes son: la felicidad y la plenitud en la vida no las da el dinero, la opresión por parte de los señores, el desprecio y la falta de atención hacia sus criados, las humillaciones continuas a las que son sometidos cada día los sirvientes, la incultura generalizada en las clases bajas de la sociedad de la época, la resignación de los miembros de las clases más bajas al aceptar su condición de inferiores, siendo considerados casi como animales.

En definitiva, la novela muestra las abismales desigualdades que existían en una España aún en vías de desarrollo. Mario Camus logra plasmar en su película la realidad de un país, en el que en plenos años 60, aún había familias habitando en cavernas, alimentándose de ratas o, como en el caso de la familia que protagoniza esta película, viviendo en chozas similares a las del neolítico, sin luz eléctrica ni agua. Mediante numerosos contrastes, el director presenta también la otra cara de la sociedad: una familia burguesa y deshumanizada, rodeada de lujos y frivolidad.  

Mario Camus cuenta en una entrevista que, desde el primer momento que leyó la novela de Delibes, se imaginaba la plasmación de la misma en imágenes. Camus se enamoró de la novela desde el primer instante.

Miguel Delibes

2. La secuencia con la Milana. Paco Rabal consigue, con su magistral interpretación, dar vida a uno de los personajes más recordados de la historia del cine español, todo un icono de la filmografía nacional: Azarías. Rabal encarna al hermano de Régula, un retrasado mental cercano a la senectud. Azarías tiene un gran apego por un búho enfermo que tiene enjaulado, al que llama “La Milana”. Una de las secuencias más inolvidables es aquella en la que Azarías corre tras su pájaro, que se posa en un tejado, pero vuelve finalmente para posarse en su hombro, ante la expectación de toda la finca, mientras pronuncia su célebre frase: “Milana bonita”. La secuencia de la que hablamos tuvo gran complejidad a la hora de rodarse, sobre todo, por la dificultad de contar con un animal en la misma. Tal como indicaba Mario Camus en una entrevista, rodar con animales es extremadamente complicado, porque nunca estás convencido de como van a reaccionar a la hora de filmar.

Francisco Rabal y La Milana


Os dejo con unos comentarios del propio Mario Camus al respecto de lo que hemos comentado antes.





Los Santos Inocentes es un reflejo de aquella España en la que los poderosos mantenían semiesclavizadas a las clases más desfavorecidas, en virtud de perpetuar una jerarquía social que mantenía a una parte de la población en la miseria, en el analfabetismo y en la desgracia. Aunque todos teníamos claro, hace unos años, que esta situación en España ya había pasado a la historia, es necesario advertir, que debemos estar expectantes ante los acontecimientos actuales, ya que la denominada “crisis” se está llevando por delante mucho de los derechos ciudadanos y/o laborales que tanto trabajo nos ha costado conseguir. Así que alerta, no queremos en España volver a la situación que vivió Azarías y su familia.

jueves, 28 de junio de 2012

Hysteria, de Tanya Wexler


Título original: Hysteria. Dirección: Tanya Wexler. País: Reino Unido. Año: 2011. Duración: 103 min. Género: Comedia romántica. Guión: Jonah Lisa Dyer y Stephen Dyer; basado en un argumento de Jonah Lisa Dyer, Stephen Dyer y Howard Gensler. Producción: Tracey Becker, Judy Cairo y Sarah Curtis. Música: Cast Waltzing. Fotografía: Sean Bobbitt. Montaje: Jon Gregory. Diseño de producción: Sophie Becher. Vestuario: Nic Ede. Estreno en España: 15 Junio 2012.
Intérpretes: Maggie Gyllenhaal (Charlotte Dalrymple), Hugh Dancy (Mortimer Granville), Rupert Everett (Edmund St. John-Smythe), Jonathan Pryce (Dr. Robert Dalrymple), Felicity Jones (Emily), Gemma Jones (Lady St. John-Smyhte), Sheridan Smith (Molly), Ashley Jensen (Fannie).

Sinopsis:
Inglaterra. Siglo XIX. El doctor Joseph Mortimer Granville inventó el primer vibrador eléctrico para tratar lo que entonces se llamaba “histeria femenina”. Los síntomas eran insomnio, retención de líquidos, espasmos musculares, irritabilidad o pérdida de apetito.

Maggie Gyllenhaal


Calificación: 6, Aceptable.
Lo mejor de la película: Buenos momentos de humor y un ritmo trepidante. Algunas secuencias son formidables, en la línea de la mejor comedia británica. El diseño de producción está muy acertado, sumergiéndonos en el siglo XIX con gran facilidad. También es destacable el tufillo reivindicativo que respira el filme, como no podía ser menos, al tratar un tema como éste y dirigirlo una mujer.
Lo peor de la película: No apta para radicales feministas, que quizás puedan salir de la sala con “Histeria”. Algunos pueden pensar que se trata el tema con cierta superficialidad, pero hay que pensar que está realizado en clave de comedia. ¡Se imaginan este mismo tema en manos de Woody Allen!

Trailer de la película:

miércoles, 27 de junio de 2012

Las reencarnaciones de Shirley MaClaine




La reencarnación es la creencia según la cual, al morir una persona, su alma se separa momentáneamente del cuerpo, y después de algún tiempo toma otro cuerpo diferente para volver a nacer en la tierra. Por lo tanto, los hombres pasarían por muchas vidas en este mundo.

¿Y por qué el alma necesita reencarnarse? Porque en una nueva existencia debe pagar los pecados cometidos en la presente vida, o recoger el premio de haber tenido una conducta honesta. El alma está, dicen, en continua evolución. Y las sucesivas reencarnaciones le permite progresar hasta alcanzar la perfección. Entonces se convierte en un espíritu puro, ya no necesita más reencarnaciones, y se sumerge para siempre en el infinito de la eternidad.

Esta ley ciega, que obliga a reencarnarse en un destino inevitable, es llamada la ley del “karma”.

La protagonista de “Irma la Dulce” está convencida de haberse reencarnado varias veces.




Shirley MaClaine ha afirmado en más de una ocasión que se ha reencarnado varias veces. Ha vivido anteriormente como hombre y como mujer, y según señala “con toda seguridad he sido una prostituta en otras vidas anteriores. No es accidental que haya interpretado a todas esas putas en las películas”.  

La actriz también está convencida de que su hija Sachi, fue su hermana en una vida anterior, lo mismo que su madre, un cacao familiar difícil de desentrañar para todos aquellos que no crean en la reencarnación.

Por otro parte, Shirley también se adjudica el papel de juglar en la corte del rey francés Luis XV. Su impertinencia en tal oficio le granjeó una condena a la decapitación por impertinente. Shirley tiene un claro recuerdo de haber sido decapitada en una de esas vidas, lo que le valió para superar el miedo escénico que padecía en sus primeros tiempos como actriz. El recuerdo de haber perdido la cabeza por oficio del hacha del verdugo es muy vivido para la estrella. Shirley afirma que vio rodar su cabeza y contempló como una lágrima se derramaba por uno de sus ojos.

Los amigos de Shirley le han aconsejado en más de una ocasión que deje de contar este tipo de experiencias, ya que su carrera podría verse afectada. Pero ella no les hace caso y continúa contando todas estas experiencias.

Entre algunas de sus excentricidades más notables se cuenta que mantiene contacto cotidiano con sus espíritus-guía, usa el poder de los cristales en su vida, posee una gran empatía que le permite atrapar los pensamientos y emociones ajenas, y explora frecuentemente sus vidas anteriores, en un intento de permanecer en contacto con lo que denomina su “Yo Superior”.

Ahí os dejo eso, nunca acabaremos sabiendo todos los secretos de las estrellas de Hollywood.

Shirley MaClaine en la actualidad

martes, 26 de junio de 2012

Adiós a Juan Luis Galiardo




Ha fallecido uno de nuestros grandes en cine, teatro y televisión, un animal literario que se comía las tablas y engullía las cámaras: Juan Luis Galiardo, un hombre que ha sido dirigido por los grandes realizadores de nuestro cine. Contaba setenta y dos años y ha muerto en la Clínica de la Zarzuela de Madrid, después de una rápida y devastadora enfermedad.

Un cáncer de pulmón ha acabado con este genio de la escena, intérprete de películas como «El disputado voto del señor Cayo», «Madregilda», «Familia», «Lázaro de Tormes», «El caballero Don Quijote», «Todos a la cárcel» o «La chispa de la vida», su postrera aparición en la gran pantalla, dirigido por Álex de la Iglesia.

En el año 2000 ganó el premio Goya al mejor actor protagonista por su interpretación en la película «Adiós con el corazón», dirigida por José Luis García Sánchez. A lo largo de su carrera recibió dos nominaciones más de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de España: una por su papel en el reparto de «El vuelo de la paloma», y otra como protagonista de «El caballero Don Quijote» (2002, firmada por Manuel Gutiérrez Aragón).

Juan Luis Galiardo, fiel a su espíritu de incansable trabajador, permaneció al pie del gran cañón de la escena hasta sus últimos días, compaginando el rodaje de la serie «Gran Hotel», que está previsto que se estrene en otoño en Antena 3, con el final de la gira de «El Avaro», su último y exitoso proyecto teatral.

El actor expresó su última voluntad pidiendo a cuantos le conocían y admiraban que le recordaran a través de sus interpretaciones.

Juan Luis Galiardo nació en 1940, en San Roque (Cádiz), el mayor de seis hermanos, hijo de un ingeniero agrónomo. Pero su infancia y juventud serán recuerdos de un patio pacense, donde su padre, por motivos laborales, fue trasladado. Se formó Galiardo en el Colegio de los Jesuitas de Villafranca de los Barros (Badajoz) y en el de los Capuchinos de Dos Hermanas (Sevilla). Acabó el Bachillerato, practicó el atletismo y estudió Ingeniería Agrónoma, de ahí pasó a Económicas y Derecho, en Madrid.

Sin embargo, su amistad con alumnos de la Escuela de Cinematografía le llevó a apasionarse por el cine, de tal manera, que abandona sus estudios en 1961, para ingresar al año siguiente en la Escuela Oficial de Cine, donde se tituló, -hoy desaparecida-, y en la de Arte Dramático. Esta enseñanza la compaginaba con su grado de meritorio en el aprendizaje con José Luis Alonso de Santos, en el Teatro María Guerrero.

Juan Luis Galiardo, junto a otros actores, fundó el grupo T.E.I (Teatro Experimental Independiente), dirigido por Miguel Narros, pero el realizador Jorge Grau le pidió incorporarse al reparto de «Acteón» (año 1965), una película de gran éxito en Moscú, a la que siguió su primer papel protagonista en cine en «El arte de vivir», de Julio Diamante.

Desde ese momento y hasta la fecha intervino en más de un centenar de obras, entre teatro, cine y televisión

Juan Luis Galiardo en la ceremonia de los Goya

Junto al Goya, entre los galardones obtenidos en su carrera destacan el de Mejor actor por «Martes de Carnaval» (en el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva); Premios Sant Jordi de Cine: Premio Especial de la Crítica de RNE; Premio ACE (Nueva York) por «El caballero Don Quijote»; Mejor actor por «Adiós con el corazón» (Festival de Cine Español de Málaga); Premios Turia: Premio por su trayectoria profesional; Mejor actor por Familia (Festival de Cine Hispano de Miami); Premio Fotogramas; Medalla del Círculo de Escritores Cinematográficos. Descanse en paz un genio de la escena en cine, teatro, televisión, y en la vida.

Hoy lo recordaremos en una de sus brillantes interpretaciones, concretamente en “Familia”, dirigido por Fernando León de Aranoa, dando vida a Santiago, un hombre acompañado de una extraña “Familia”.  Descanse en paz.


domingo, 24 de junio de 2012

Recordando... El cocinero, el ladrón, su mujer y su amante





Título original: The cook, the thief, his wife and her lover. Dirección: Peter Greenaway. País: Reino Unido. Año: 1989. Duración: 123 min. Género: Drama. Guión: Peter Greenaway. Producción: Kees Kasander. Fotografía: Sacha Vierny. Montaje: John Wilson. Música: Michael Nyman. Vestuario: Jean Paul Gaultier.

Intérpretes: Richard Bohringer (Richard, el cocinero), Michael Gambon (Albert Spica, el ladrón), Helen Mirren (Georgina Spica, su mujer), Alan Howard (Michael, su amante). 

Sinopsis: Albert es el sádico dueño de un restaurante. Su fuerte carácter y las tiránicas formas que aplica en el trabajo hacen que todos sus empleados estén sometidos a un continuo régimen de esclavitud, incluida su esposa a quien ridiculiza constantemente.


Aprovechando que hemos podido disfrutar recientemente de la presencia de Peter Greenaway en Sevilla, traigo aquí esta película del director galés. En la conferencia que ofreció explicaba los nuevos caminos por los que opinaba que debía discurrir el cine, alejado del texto y de la narración. Pienso que esto es algo más fácil de decir que de hacer, pero no se le puede negar su trabajo de exploración y el deseo de abrir nuevas perspectivas.

Es innegable la primacía que da Greenaway a lo estético y a lo sensitivo, fruto de su amplia formación en el campo de las Bellas Artes. Y esto es lo primero que nos impacta de su película. Arropado de un estilo barroco, crea un ambiente teatral de rojos cortinajes de fondo, abigarrada ambientación, telones que se echan. Y esto es así en tres de los escenarios que más aparecen: el exterior del restaurante, el comedor y la cocina. Al ver tanto animal abierto en canal, imposible no acordarse del tema del buey desollado, con una luz barroca a lo Carracci o a lo Rembrandt (diferente a la estética de las versiones de Soutine o Bacon). También destacan los exquisitos bodegones que observamos en primer plano gracias majestuosos travellings laterales.


Si quedaba alguna duda de la ambientación barroca, tenemos una referencia bien explícita. Repetidas veces apreciamos una obra pictórica de gran formato, El banquete de oficiales de la Compañía de la guardia cívica de San Jorge (Frans Hals, 1616). Buen ejemplo de retrato colectivo que muestra individualización en rostros, figuras y poses, recoge un ágape de esta agrupación de caballeros que colaboraban en el mantenimiento del orden de las ciudades. Es el telón de fondo de las cenas de Albert Spica y su séquito, los “caballeros” que mantienen el “orden” que quiere su jefe.

Si en Linterna Mágica tocamos en el pasado mes la díada gastronomía y cine ilustrándola con la película El festín de Babette, donde se nos ofrecía un elegante menú, Greenaway también presenta variadas suculencias. Pero él no se queda aquí, sino que además explora lo repugnante y lo que provoca nuestro más profundo rechazo. Me refiero a las secuencias que abren y cierran la película: coprofagia y antropofagia, ambas obligadas. Y es que lo macabro, la crueldad, es un tema del gusto del director que aparece aquí sin tapujos, en primer plano.


Otro aspecto que destaca es el vestuario de Jean-Paul Gaultier (recordar que el diseñador está en pleno apogeo como gurú de lo transgresor: al año siguiente vestiría a Madonna en la gira de Blond Ambition). Helen Mirren aparece vestida con los elementos habituales de sus creaciones: corsés, enrejados, plumas... Todo en aras de un erotismo de alta costura. Este vestuario adapta su cromatismo al escenario en que se encuentra, de modo que en la misma secuencia la ropa cambia de color como por arte de magia.

La iluminación crea también efectos conseguidos combinando los colores con sus complementarios, como es el caso del rojo (color que vence por goleada) sobre el que cae una luz intensa verde. Esto se ve, por ejemplo, cuando Albert Spica estalla de ira. Sin embargo, en una escena íntima entre Georgina y su amante, sobre un fondo verde, aparecen ellos iluminados por una atractiva luz roja anaranjada.



Por último, pero no menos importante, destacar la banda sonora de Michael Nyman, que es colaborador habitual de Greenaway. La música favorece la solemnidad de ciertos momentos, el significado de algo cercano a un rito (y es el cocinero el sacerdote, el que, a través de la comida y gracias a su complicidad, favorece la unión de los amantes, y a la vez da testimonio de ellos: “¿cómo puedo saber que me quería si no había testigos?”).

De las composiciones de Nyman destacan dos. El Memorial está inspirado en el Rey Arturo de Henry Purcell (sí, barroco también). Nyman lo compuso en 1985 dedicado a las víctimas del Estadio Heysel. Asombra realmente que no esté pensado para la película porque encaja a la perfección. También hay que subrayar el Miserere, basado en el Salmo 51 de la Biblia que termina con estas palabras: “aceptarás entonces los sacrificios justos / holocaustos y oblaciones / ofrecerán entonces sobre tu altar novillos”.




viernes, 22 de junio de 2012

Moonrise Kingdom, en cartelera




Título original: Moonrise kingdom. Dirección: Wes Anderson. País: USA. Año: 2012. Duración: 95 min. Género: Comedia dramática. Guion: Wes Anderson y Roman Coppola. Producción: Jeremy Dawson, Scott Rudin, Steven Rales y Wes Anderson. Música: Alexandre Desplat. Fotografía: Robert Yeoman. Diseño de producción: Adam Stockhausen. Vestuario: Kasia Walicka Maimone. Estreno en USA: 25 Mayo 2012. Estreno en España: 15 Junio 2012.
Intérpretes: Bruce Willis (Capitán Sharp), Edward Norton (Jefe de tropa de los scouts), Bill Murray (Sr. Bishop), Tilda Swinton (Servicios sociales), Jason Schwartzman (primo Ben), Frances McDormand (Sra. Bishop), Kara Hayward (Suzy), Jared Gilman (Sam).

Sinopsis:
La historia de “Moonrise kingdom” está ambientada en una isla de la costa de Nueva Inglaterra en el verano de 1965 y cuenta la historia de una chica y un chico de doce años que se enamoran, hacen un pacto secreto y se escapan a terrenos selváticos e inexplorados. Cuando varias autoridades intentan perseguirles, se forma una violenta tormenta en la costa… y la comunidad de la pacífica isla se verá trastornada irremediablemente.

 
Frances McDormand y Bruce Willis


Calificación: 7, Buena.
Lo mejor de la película: Un guión muy original con una historia que engancha rápido al espectador, fuera de los cánones del cine americano actual. La elección de los actores principales infantiles es muy acertada. La fotografía también muy original, enlaza con la estética única del universo Anderson.
Lo peor de la película: El desarrollo de la historia es demasiado corto, dejando algunos personajes poco definidos. Todo se podría salvar con un poquito más de metraje, eso que le sobra a muchas películas.
 
Trailer de la película:


jueves, 21 de junio de 2012

¿Walt Disney congelado?





Hace unos días hablábamos en nuestro blog de la película “Abre los ojos”, de Alejandro Amenábar, que contaba en su temática central con la criogenia.

Con frecuencia se denomina erróneamente criogenia a la criónica o criopreservación, que es el conjunto de técnicas utilizadas para preservar, utilizando muy bajas temperaturas, personas legalmente muertas, o animales, para una posible reanimación, cuando la ciencia y la tecnología futura puedan remediar toda enfermedad y revertir el daño debido al proceso de criopreservación.

En EE.UU. ya existen compañías, como la Alcor, que se dedican a la criopreservación de cuerpos o cabezas humanas por las que han pagado sus dueños o familiares, optando por la conservación de la base biológica, para luego, en tiempos donde el conocimiento científico sea el adecuado, los encargados de estas compañías los hagan "volver a funcionar" por métodos mecánicos o cibernéticos. Los encargados de estas compañías dedicadas a la criónica se comprometen ante la ley y los propios consumidores a cumplir los requisitos de los acuerdos iniciales.

Siempre se ha hablado de que el cadáver de Walt Disney fue sometido a un proceso de este tipo a la espera de que la ciencia encuentre una cura para la enfermedad que le mató.

¿Walt Disney congelado?
El creador de las maravillas del cine de animación como Blancanieves y los siete enanitos o Fantasía no permanece congelado en animación suspendida. Una leyenda urbana afirma que Walt Disney fue sometido a un proceso de criopreservación en el momento de su muerte, en 1966, y su cuerpo congelado fue depositado bajo la atracción de los Piratas del Caribe, en Disneylandia.

En realidad, el cadáver del dibujante, director y productor fue sometido al proceso contrario, es decir, le incineraron y sus cenizas se encuentran en el cementerio de Forest Lawn, uno de los que acogen en la ciudad de Los Ángeles a las estrellas más famosas del mundo del cine y la televisión.

Walt Disney siempre estuvo obsesionado con la muerte. Cuando la suya se produjo, su funeral se celebró en secreto, y la causa de su fallecimiento nunca se hizo pública. Estas circunstancias alentaron el rumor de que Disney había sido mantenido en animación suspendida.

En realidad, parece ser que falleció víctima de un cáncer que se le manifestó en el pulmón izquierdo. Como testigo de la ceremonia de cremación a que fue sometido su cuerpo en el cementerio firmó un tal Dean Fluss, embalsamador del lugar.

miércoles, 20 de junio de 2012

Acto de valor, de Mike McCoy y Scott Waugh




Título original: Act of valor. Dirección: Mike McCoy y Scott Waugh. País: USA. Año: 2012. Duración: 105 min. Género: Acción, bélico. Guión: Kurt Johnstad. Producción: Mike McCoy y Scott Waugh. Música: Nathan Furst. Fotografía: Shane Hurlbut. Montaje: Scott Waugh y Michael Tronick. Diseño de producción: John Zachary. Vestuario: Erica Clum. Estreno en USA: 24 Febrero 2012. Estreno en España: 15 Junio 2012.
Intérpretes: Roselyn Sanchez (Lisa Morales), Jason Cottle (Abu Shabal), Alex Veadov (Christo), Nestor Serrano (Walter Ross), Emilio Rivera (Sanchez).
Sinopsis:
La película “Acto de valor” es un relato ficticio que refleja la verdadera labor de Navy SEAL reales en activo. Cuando una misión para rescatar a un agente de la CIA desvela inesperadamente un complot que podría tener consecuencias inimaginables, un equipo de soldados de élite, altamente entrenados para el mundo contemporáneo, sale en una misión secreta. Estos SEAL tendrán que avanzar a contrarreloj en una misión que parece no tener fin, pasando por lugares conflictivos repartidos por todo el mundo y tendrán que luchar para mantener el equilibrio entre su compromiso con la nación, con sus compañeros y con sus familias.


Roselyn Sánchez


Calificación: 4, Deficiente.
Lo mejor de la película: Algunas escenas de acción no están mal resueltas y consiguen distraer a un cierto público palomitero. En USA ha obtenido una gran recaudación en taquilla, superando con creces sus expectativas.
Lo peor de la película: Un guión muy flojo que sólo persigue hacer propaganda yanqui. Bastante hartible. Sólo funciona como fórmula para reclutar efectivos. La voz en off sobra.  La música no aporta nada nuevo y simplemente se inspira en otras de la misma serie.
Trailer de la película:


jueves, 14 de junio de 2012

Recordando... Abre los ojos, de Alejandro Amenábar





"Mejor que Tesis" (Carlos Boyero)

Año: 1997
País: España
Dirección: Alejandro Amenábar
Producción: Fernando Bovaria y Jose Luis Cuerda.
Guión: Alejandro Amenábar y Mateo Gil
Fotografía: Hans Burmann
Música: Alejandro Amenábar y Mariano Marín
Montaje: María Elena Sáinz de Rozas
Vestuario: Concha Solero
Dirección artística: Wolfgang Burmann

Intérpretes: Eduardo Noriega, Penélope Cruz, Chete Lera, Fele Martínez, Najwa Nimri, Gérard Barray, Pedro Miguel Martínez, Jorge de Juan, Miguel Palenzuela, Ion Gabella, Joserra Cadiñanos, Tristán Ulloa, Pepe Navarro, Walter Prieto.

Sinopsis: César (Eduardo Noriega) es un joven atractivo y adinerado, que ha heredado de su familia lucrativos negocios de hostelería. Al contrario que su amigo Pelayo (Fele Martínez), tiene éxito en sus relaciones con las mujeres, no manteniendo una ligazón seria con ninguna. En la fiesta de su cumpleaños conoce a la acompañante de Pelayo, Sofía (Penélope Cruz), a la que intenta seducir ante el acoso de Nuria (Nawja Nimri), su última conquista. Cuando salga de casa de Sofía, Nuria requerirá su compañía haciéndolo montar en su coche. Poco después sufrirán un accidente que acabará deformando su rostro.


Fotograma de "Abre los ojos"


En 1996, Alejandro Amenábar estrenó su ópera prima “Tesis”, cosechando un gran éxito de público y crítica. Ganó el Goya a la Mejor Película y el Goya al Mejor Director Novel en la XI edición de los Premios Goya. Un año después, todo el mundo estaba inquieto por el nuevo estreno de este director chileno afincado en España. Así llegó “Abre los ojos”, su segunda película y su segundo thriller, un género que dominaba a la perfección. La nueva película de Amenábar contaba con dosis de ciencia-ficción, intentando hacer una difícil combinación entre la realidad y la ficción. Tras el éxito de “Abre los ojos”, llegarían otros como la terrorífica “Los otros” (1997), el drama de “Mar adentro” (2004) o la histórica “Ágora” (2009). En el año 2001 se rodó en Estados Unidos “Vanilla Sky”, un remake de “Abre los ojos” en el que Penélope Cruz volvió a interpretar el papel de Sofía, cambiando su trasfondo como mimo y actriz en prácticas por el de bailarina clásica.

Pero fijémonos por unos instantes en dos detalles de “Abre los ojos”, la película que hoy recordamos:
 
1. La música.
Para su segunda película, Alejandro Amenábar dispuso de un presupuesto mucho mayor al de su ópera prima, debido en gran medida al éxito de ésta. Y en ese saco que es el tener un gran presupuesto está incluido el disponer de una orquesta como la Filarmónica de Praga. Así que el reto de Amenábar era el componer una banda sonora para una orquesta de gran nivel. ¿Lo hizo? Sí, con su segunda película Amenábar deja clara otra faceta que quizás en “Tesis” no había quedado del todo clara. ¿Sabe este chico componer realmente bien? La respuesta vuelve a ser sí. Y es que para “Abre los ojos”, una película en la que intervienen muchos sentimientos distintos, era necesario componer un score muy completo, algo realmente difícil de hacer incluso para grandes maestros ya consagrados. “Abre los ojos” da miedo, produce ternura, hace gracia y emociona. Y todo esto tenía que estar en la música.
Abre los ojos es el primer tema del score, quizás el más espectacular ya que aprovecha al máximo lo que una orquesta significa pero sin hacer demasiado ruido, es decir, va en crescendo hasta romper en una gran sinfonía al más puro estilo Hollywoodiense, como si de una película de superhéroes se tratara. Esta Overtura abre un cd (y una película) que nos dará muchas y variadas sorpresas. El siguiente tema es Sofía, un bellísimo y sencillo tema a piano que nos demuestra la candidez del personaje que interpreta Penélope Cruz. A partir de ahí la banda sonora se irá volviendo algo más oscura para describir con sutileza y sin alardes el estado pesadillesco por el que pasa el personaje. Con un estilo claramente influido por Bernard Herrmann, el Bernard Herrmann de Vertigo, no de Psicosis, Amenábar nos introduce en un ambiente tierno, dulce y a la vez terrible del que no podremos salir hasta terminada la película. Temas como ¿Dónde está Sofía? ponen de manifiesto el tono de thriller que tiene la historia y temas como El Parque (una de las secuencias más bonitas de la película) o Eres mi mejor amigo nos adentran en el mundo de sentimientos complejos que tiene el protagonista.
La Banda Sonora de “Abre los ojos” fue editada en un doble Cd. El primero contenía una serie de canciones Pop-Rock que Amenábar utilizó o bien para ambientar secuencias como la de la discoteca o también para contar de una forma concreta una escena (la del accidente de coche va en función de la canción). El segundo Cd es el score propiamente dicho, la música instrumental compuesta por Alejandro con la colaboración de Mariano Marín.



2. El homenaje a “Vértigo”.
Sin lugar a dudas, Amenábar debe ser un gran admirador del maestro Alfred Hitchcock, de manera que en esta película ya encontramos detalles claramente significativos de estas influencias. Antes hemos mencionado el tema de la música, cómo Amenabar trabaja la música de esta película en la línea de lo que hizo Herrmann para “Vértigo”. No obstante, al visionar la película con atención observamos una clara secuencia-homenaje al mago del suspense. Se trata de la aparición de Sofía (Penélope Cruz) secuencia idéntica al momento en el que aparece por primera vez Judy (Kin Novak) convertida en Madeleine. Es increíble la semejanza, no sólo por el contenido de la secuencia, sino por la fotografía, por la composición, por la música, etc. Un claro homenaje en toda regla.     

La aparición de Judy (Kin Novak)

La aparición de Sofía (Penélope Cruz)

Os dejamos con un vídeo que resalta tanto la faceta de Amenábar como compositor, como la secuencia antes mencionada de homenaje a Hitchcock.