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sábado, 10 de julio de 2021

Deseando amar (In the mood for love) (Wong Kar-wai, 2000)

 

Título original: Fa yeung nin wa (In the Mood for Love). Dirección: Wong Kar-wai. País: Hong-Kong. Año: 2000. Duración: 95 min. Género: Drama.  

Guión: Wong Kar-wai. Fotografía: Christopher Doyle, Mark Lee. Música: Michael Galasso, Shigeru Umebayashi. Montaje: William Chang. Dirección Artística: Christopher Doyle, Ping Bing. Producción: Wong Kar-wai.

Mejor Actor (Tony Leung) en el Festival de Cannes 2000. Premio Cesar 2001 a la Mejor Película extranjera. Mejor Película 2001 extranjera para los Círculo de Críticos de Nueva York. Nominada a Mejor Película en habla no inglesa en los Premios BAFTA 2000.

Fecha del estreno: 16 Febrero 2001 (España).

 

Reparto: Maggie Cheung (Sra. Chan), Tony Leung (Sr. Chow), Siu Ping Lam (Ah Ping), Rebecca Pan (Sra. Suen), Kelly Lai Chen (Sr. Ho), Joe Cheung, Chan Man-Lei (Sr. Koo), Chin Tsi-ang (Sirvienta), Roy Cheung (voz Sr. Chan), Paulyn Sun (voz Sra. Chow).

 

Sinopsis:

Hong Kong, 1962. Chow, redactor jefe de un diario local, se muda con su mujer a un edificio habitado principalmente por residentes de Shanghai. Allí conoce a Li-zhen, una joven que acaba de instalarse en el mismo edificio con su esposo. Ella es secretaria de una empresa de exportación y su marido está continuamente de viaje de negocios. Como la mujer de Chow también está casi siempre fuera de casa, Li-zhen y Chow pasan cada vez más tiempo juntos y se hacen muy amigos. Un día, ambos descubrirán algo inesperado sobre sus respectivos cónyuges.

 

Comentarios:

Comenzábamos un nuevo siglo (y milenio) allá por el año 2000 y alguien desde el lejano oriente nos vino a alegrar este primer año de una nueva era con una película realmente especial. Ese alguien, era el director hongkonés (aunque nacido en Shangai) Wong Kar-wai y la película era “Deseando amar” (In the mood for love).

Es difícil describir con palabras la belleza de esta película en particular. Se trata de una película de miradas que hablan, de detalles que van haciendo avanzar la trama, de música que te pone un nudo en la garganta, de imágenes en cámara lenta que te reconcilian con la vida. Es, sencillamente, una grandiosa película.

El argumento es el siguiente: en el Hong-Kong de 1962 dos matrimonios (los señores Chow y los señores Chan) se van a vivir uno al lado del otro en apartamentos en los que se alquilan habitaciones. A las pocas semanas, el señor Chow y la señora Chan se dan cuenta que sus respectivas parejas son amantes el uno del otro. Por ello, se empiezan a ver a la salida del trabajo para reconfortarse mutuamente, naciendo una relación muy especial entre ellos.

Los actores principales son Maggie Cheung, en el papel de la señora Chan y Tony Leung, en el papel del señor Chow. Ambos actores llevaban trabajando con Wong Kar-way desde 1991, especialmente Tony Leung que ha protagonizado casi todas las películas de este director.

El guión es del propio director, y en él se aprecian los recuerdos de su infancia, especialmente en las diferentes canciones que aparecen durante el metraje, así como la referencia, que se hace varias veces durante la película de haber ido al cine, cosa que Wong Kar-wai hacía con asiduidad durante su infancia, la cual coincide con la época en que está ambientada la trama.

 

 

El trabajo del director es realmente majestuoso, especialmente en algunos aspectos. La colocación de la cámara en las tomas en las que ésta se mantiene fija es prácticamente perfecta, y siempre dando la impresión al espectador de que estamos escondidos detrás de algo viendo lo que sucede en pantalla, para ello coloca algún objeto en primer plano a un lado de la misma, que pudiese servir para ocultar al que estuviese observando las diferentes escenas. En las tomas en las que la cámara se mueve, ésta se desplaza lentamente a lo largo de los diferentes encuadres de una forma no lineal, dando una estilización excepcional a ésta magnífica obra. Esto destaca especialmente en las tomas que se producen a cámara lenta, acompañadas por la pieza “Yumeji´s theme” de Shigeri Umebayashi, las cuales van separando la narración en diferentes tramos.

Precisamente es la música otro de los apartados más destacados. El tema principal de la banda sonora es el que me acabo de referir en el párrafo anterior, el cual es una adaptación de un tema que salía en la película “Yumeji” dirigida por Seijun Suzuki. También aparecen tres composiciones de Michael Galasso: “Angkor Wat theme”, “ITMFL” y “Casanova / flute” y así mismo suenan durante la película tres canciones interpretadas en español por Nat King Cole: “Aquellos ojos verdes”, “Te quiero, dijiste” y “Quizás, quizás, quizás”.

 

 

Pero la música también está relacionada con el título de la película en sus diferentes idiomas, ya que el título original en chino es “Dut yeung nin wa”, el cual es el título de una canción china que aparecía en una película de dicho país de 1946. Así mismo el título en inglés “In the mood for love”, proviene de una canción de Bryan Ferry, la cual iba en un principio a aparecer en el film, llegando a sonar en el primer trailer que se hizo. Sin embargo, finalmente se descartó la utilización de esta canción en la banda sonora, aunque sí quedó como título en inglés.

La dirección artística estuvo a cargo de Christopher Doyle y de Ping Bing Lee, los cuales lograron escenas de una belleza monumental y que, junto al trabajo del director, hacen que esta obra tenga momentos de una perfección formal y técnica absoluta.

Otro de los aspectos que más destacan, es el del vestuario femenino. La relación de trajes con los que aparece Maggie Cheung en la película levanta admiración en todas las personas que conozco que han podido disfrutar de ella. Trajes estampados, con un colorido excepcional y muy entallados, que realmente llaman la atención al espectador.

 

 

Uno de los detalles más originales de la película es el hecho de que a los dos cónyuges de los protagonistas nunca se les ve la cara, apareciendo siempre de espaldas a la cámara o manteniendo diálogos con los otros actores fuera de plano. Esto hace que nuestra afinidad con los protagonistas sea aún mayor, ya que al ocultársenos el rostro de estos dos personajes tan importantes para la trama, nos pongamos más en situación de sentir afinidad por las personas que han sido engañadas por sus parejas respectivas.

Quiero acabar esta reseña con otro dato, en la encuesta que la revista “Sight and sound” realizó en el año 2012 para saber cuáles eran las mejores películas de la historia quedó en el puesto número 24, siendo éste,  el mejor conseguido por una película de la década del 2000 al 2010.

En definitiva, se trata de una grandísima película que tiene múltiples lecturas que se van añadiendo con cada nuevo visionado, y que como dijo un famoso crítico de cine español en su momento: “preciosa película, maravillosa… la historia de amor más triste del mundo”. (Gabriel Menéndez)

Recomendada.

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