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viernes, 18 de septiembre de 2015

Les combattants, de Thomas Cailley



Título original: Les combattants. Dirección: Thomas Cailley. País: Italia, Francia. Año: 2014. Duración: 98 min. Género: Comedia, Drama. Guión: Thomas Cailley y Claude Le Pape. Producción: Pierre Guyard. Dirección de Producción: Mathieu Verhaeghe. Fotografía: David Cailley. Música: Philippe Deshaies, Lionel Flairs, Benoit Rault. Montaje: Lilian Corbeille. Sonido: Jean-Luc Audy. Decorados: Paul Chapelle. Vestuario: Arianne Daurat. Maquillaje: Marine Beaudoin.  Estreno en España: 3 Septiembre 2015.
Intérpretes: Adèle Haenel (Madeleine), Kévin Azaïs (Arnaud), Antoine Laurent (Manu Labrède), Brigitte Roüan (Hélène Labrède), William Lebghil (Xavier), Thibault Berducat (Victor), Nicolas Wanczycki (Teniente Schliefer).

Sinopsis:
Entre sus amigos y el negocio familiar, el verano del joven Arnaud parece que será tranquilo... hasta que conoce a Madeleine, tan bella como arisca, un bloque de músculos tensos y catastróficas profecías. Él no espera nada, ella se prepara para lo peor. Él se toma la vida con calma, con una sonrisa. Ella sólo piensa en hacer el curso para entrar en el ejército ¿Hasta dónde podrá seguir Arnaud a Madeleine, cuando ella nunca le pidió nada? Es una historia de amor. O de supervivencia. O ambas.

Adele Haenel y Kevin Azais

Comentarios:
Ganadora del César 2014 a la Mejor Ópera Prima, nos llega este primer trabajo de Thomas Cailley, que también consiguió el Premio FIPRESCI (Quincena de realizadores) en Cannes 2014.
Algunos críticos como Cuellar la tildan de una joyita muy bien trazada, una comedia desenfadada y un drama liviano. Es el primer trabajo de Cailley, y se le nota. Se le escapan ciertos detalles, pero esa frescura te deja el regusto de haber saboreado un realizador prometedor que puede dar muchas sonrisas cuando, al igual que sus personajes, madure y florezca.
Javier Ocaña describe que en una escena de Les combattants, un mando de un curso de instrucción para aspirantes a soldados en el ejército de Francia pregunta a sus alumnos cuál es el objetivo de un determinado movimiento en una batalla. Nadie lo sabe, todos andan perdidos. "¡Obtener una posición de ventaja!", grita alguien por fin. Es la clave, pero no solo en el ejército, sino también en la guerra cotidiana de la vida. Y es entonces cuando, a pesar de ambientarse durante buena parte del metraje entre soldados pipiolos, Les combattants se vuelve definitiva alegoría de los tiempos de crisis, de la juventud a la deriva, de la supervivencia laboral, social, moral, cultural y emocional, del sálvese quién pueda.
Si hay espectadores que se quedan en la superficie, solo van a ver una especie de primera mitad de bolsillo de La chaqueta metálica para una Europa perdida en el agujero de la nada. Los que rasquen más, verán que ese "bosque que empieza de cero, que se reinicia" a partir de un gran incendio, son las nuevas sociedades; que hay dos posibilidades ante las desastrosas expectativas para el futuro: pegarte de tortas con la vida e intentar domarla a cada minuto mientras eres continuamente infeliz, o caminar por ella con el sosiego de ir dando soluciones factibles a cada problema. Les combattants se convierte así, gracias a su metáfora, en un pequeño y guerrero relato de apariencia sencilla y largo alcance.


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