Título original: Les héritiers. Dirección: Marie-Castille Mention-Schaar. País: Francia. Año: 2014. Duración: 105 min. Género: Comedia dramática. Guion: Ahmed Dramé y Marie-Castille Mention-Schaar. Producción: Marie-Castrille Mention-Schaar y Pierre Kubel. Música: Ludovico Einaudi. Fotografía: Myriam Vinocour. Estreno en España: 15 Mayo 2015.
Intérpretes: Ariane Ascaride (Anne Gueguen), Ahmed Dramé (Malik),
Noémie Merlant (Mélanie), Geneviève Mnich (Yvette), Wendy Nieto (Jamila).
Sinopsis:
Anne Gueguen es una profesora de Historia de instituto que se preocupa
por los problemas de sus alumnos. Este año, como siempre, Anne tiene una clase
difícil. Frustrada por su materialismo y falta de ambición, Anne desafía a su
clase a participar en un concurso nacional sobre qué significa ser adolescente
en un campo de concentración nazi. Anne usará toda su energía y creatividad
para captar la atención de sus alumnos y motivarlos. A medida que la fecha
límite se acerca, los jóvenes comienzan a abrirse a los demás y a creer en sí
mismos, cambiando sus vidas.
Comentarios:
Nos encontramos ante el tercer largometraje de la realizadora francesa
Marie-Castille Mention-Schaar, el primero en llegar a nuestras pantallas tras
los inéditos ‘Bowling’ y ‘Ma première fois’. Y este trabajo se inspira en
hechos reales, la cinta nos pone de manifiesto la crónica que vivió en primera
persona uno de sus actores, también co-guionista, Ahmed Dramé (nominado a actor
revelación en los últimos premios César), como alumno en un aula problemática, por
cuestiones de efervescencia hormonal y conflictiva multiculturalidad, de un
instituto de Créteil, donde una docente embarcó a sus estudiantes en un
transformador trabajo colectivo sobre la memoria del Holocausto.
Tal como afirma el crítico Alberto Bermejo, el cine francés vuelve una y
otra vez sobre el tema esencial de la educación, una etapa decisiva para la
formación de los individuos, la convivencia y el buen funcionamiento de las
instituciones políticas y sociales.
Anne Gueguen, la profesora que alude el título del film, logrará
restituir la dignidad y la autoestima de un grupo de alumnos desastrosos y
conflictivos de un instituto de la periferia parisina. Ariane Ascaride
Ascaride, conocida sobre todo por
su participación en las cintas de su pareja, Robert Guédiguian, es una de esas
actrices capaces de encarnar un amplio abanico de emociones sin necesidad de
aspavientos, de mostrar la normalidad con gran convicción sin parecer que está
actuando, por eso llena de energía y autenticidad el personaje de esta
profesora que logra ganarse el respeto y conectar con la curiosidad congénita y
el lenguaje vital de unos jóvenes actores que parecen interpretarse a sí mismos
sin esfuerzo.
El relato alcanza un punto de inflexión superlativo, un momento de
especial realismo, con el testimonio
apabullante en el aula de un superviviente de aquella realidad aterradora
(Léon Zyguel), un deportado que
tenía la misma edad que los que le escuchan entre fascinados y sobrecogidos
cuando vivió aquella experiencia y perdió a todos los miembros de su familia.